La canasta tardía de Milos Uzan en una jugada de entrada envía a Houston a la Elite Eight con una victoria de 62-60 sobre Purdue

Houston pasó tiempo esta semana practicando una jugada de entrada que el entrenador Kelvin Sampson pensó que su equipo podría necesitar contra Purdue.

Milos Uzan, la tercera opción, lo manejó a la perfección.

Le lanzó el balón a Joseph Tugler, quien lanzó un pase picado de regreso a Uzan, y el base de 6′ 4″ se elevó hasta el aro para una bandeja sin oposición con 0.9 segundos restantes, dándole a los Cougars, primeros preclasificados, una victoria de 62-60 – y un enfrentamiento con el segundo preclasificado Tennessee en el Elite Eight del domingo.

«Una gran ejecución en un momento que la necesitábamos», dijo Sampson, quien está a una victoria de alcanzar su tercera Final Four y la segunda con Houston en cinco años. «Nunca se sabe cuándo la vas a necesitar».

Los Cougars (33-4) solo anotaron una canasta más en los últimos ocho minutos, desperdiciaron una ventaja de 10 puntos y fallaron dos tiros más en los últimos 5 segundos. Una repetición a 2,2 segundos del final confirmó que Houston se quedaría con el balón cuando este salió de la cancha tras el segundo fallo.

A partir de ahí, Uzan tomó el relevo.

«Intentaba conectar con (LJ Cryer) y JoJo hizo una lectura excelente», dijo Uzan. «Logró atraer a dos (defensores) e hizo una gran jugada para devolverme el balón».