La Corte Suprema rechaza una apelación sobre la prohibición de la terapia de conversión para niños LGBTQ+

 La Corte Suprema se negó el lunes a aceptar un caso sobre si los gobiernos estatales y locales pueden hacer cumplir las leyes que prohíben la terapia de conversión para niños LGBTQ+.

Ante el desacuerdo de tres jueces conservadores, el tribunal rechazó una apelación de Washington, donde se confirmó la ley. Un panel de apelación anuló prohibiciones locales en Florida por considerarlas una restricción inconstitucional al discurso de los consejeros.

El tribunal superior a menudo interviene cuando los tribunales de apelaciones no están de acuerdo, y en opiniones separadas, los jueces Samuel Alito y Clarence Thomas dijeron que ese estándar se cumplió fácilmente en la controversia sobre las prohibiciones de las terapias de conversión.

Thomas escribió que su colega debería haber aceptado el caso de Washington porque “los consejeros autorizados no pueden expresar nada más que la opinión aprobada por el estado sobre menores con disforia de género sin enfrentar un castigo”.

El juez Brett Kavanaugh también votó a favor de conocer el caso. Se necesitan cuatro de los nueve jueces para presentar un caso para los argumentos.

La decisión del tribunal de evitar el caso en Washington se produce cuando los esfuerzos para limitar los derechos de los niños LGBTQ+ se han extendido por todo el país .

Aproximadamente la mitad de los estados prohíben la práctica de intentar cambiar la orientación sexual o la identidad de género de una persona mediante asesoramiento.

Un consejero familiar en Washington, Brian Tingley, demandó por una ley estatal de 2018 que amenaza a los terapeutas que participan en terapia de conversión con la pérdida de su licencia. Tingley afirma que la ley viola su derecho a expresarse. El Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuito de Estados Unidos lo confirmó en una decisión dividida.

Anteriormente, la Corte Suprema había rechazado varias impugnaciones de prohibiciones estatales, pero esos casos llegaron a la corte antes de una decisión de 5 a 4 en 2018 en la que los jueces dictaminaron que California no podía obligar a los centros de embarazos en crisis antiaborto con licencia estatal a proporcionar información sobre aborto.

Desde el fallo de 2018, el Tribunal de Apelaciones del 11.º Circuito de Estados Unidos en Atlanta anuló las prohibiciones locales de Florida.