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Los fiscales acusan a Sean ‘Diddy’ Combs de violar las reglas de la cárcel y usar a sus hijos para influir en los posibles jurados
Los fiscales afirman que Sean “Diddy” Combs hizo un esfuerzo por “evadir la vigilancia policial” e “influir corruptamente en el testimonio de los testigos” mientras estaba encarcelado en el Centro de Detención Metropolitano de Brooklyn.
En nuevos documentos judiciales, que se presentaron el viernes 15 de noviembre y fueron obtenidos por PEOPLE, el magnate de la música de 55 años está siendo acusado de usar el acceso telefónico de otros reclusos, usar un «servicio de mensajería de terceros no autorizado» para comunicarse con varias personas y reclutar a sus hijos para una «campaña en las redes sociales» alrededor de su cumpleaños, supuestamente en un esfuerzo por influir en un posible jurado.
Las nuevas acusaciones surgen como parte de la oposición de la fiscalía a la última moción de libertad bajo fianza de Combs presentada el 8 de noviembre, y después de que dos jueces federales diferentes le negaran la libertad bajo fianza tras su acusación en septiembre por cargos de tráfico sexual, crimen organizado y transporte para ejercer la prostitución.
Un abogado de Combs no respondió a la solicitud de comentarios de PEOPLE el sábado 16 de noviembre.
«…Mientras intentaba evadir la vigilancia de las fuerzas del orden, el acusado, entre otras cosas, organizó campañas en las redes sociales que, según sus propias palabras, tienen como objetivo manchar el jurado; hizo esfuerzos por filtrar públicamente materiales que considera útiles para su caso; y se puso en contacto con testigos a través de terceros», alega el documento. «Por estas razones, el Tribunal debería negarle al acusado una nueva audiencia de fianza».
En la oposición, los fiscales alegan que Combs se ha «comunicado repetidamente con otros» en formas que están «diseñadas para evadir» el monitoreo de las fuerzas del orden, utilizando los códigos de acceso telefónico de otros reclusos -o números PAC- para hacer llamadas, utilizando «llamadas tripartitas para contactar a otras personas» y enviando mensajes a contactos «no autorizados» a través de un «sistema de comunicación de terceros no autorizado» llamado ContactMeASAP.
Combs también ordenó a otros «pagar a los reclusos, incluso a través de aplicaciones de procesamiento de pagos y depósitos en cuentas de economato de BOP» después de usar los números PAC de otros reclusos, alega el documento.
En cuanto a las llamadas entre tres personas, se alega que Combs dio instrucciones a las personas con las que hablaba por teléfono para que agregaran «otras personas» a la línea, un proceso que «no está autorizado por la BOP [la Oficina de Prisiones] ya que ayuda a ocultar las identidades de las personas contactadas».
Según la fiscalía, Combs también está acusado de utilizar dos cuentas en el servicio de mensajería ContactMeASAP (la primera de las cuales parecía estar asignada a su hijo y la otra a otro recluso) para enviar mensajes de texto a «docenas de personas, incluidos abogados y personas que no están en la lista de contactos del acusado».
Combs supuestamente se esforzó por «continuar sus esfuerzos para obstruir y subvertir este proceso penal», según el expediente, que señala que en «múltiples llamadas, a menudo utilizando los números PAC de otros reclusos», ha sido «explícito sobre su intención de usar declaraciones públicas para alterar la percepción pública».
«… El acusado reclutó a miembros de su familia para planificar y ejecutar una campaña en las redes sociales en torno al cumpleaños del acusado, con la intención de influir en el posible jurado en este proceso penal», afirma el documento. «Siguiendo las instrucciones cuidadosamente seleccionadas del acusado, los hijos del acusado publicaron un vídeo en sus respectivas cuentas de redes sociales en el que se mostraba a los hijos del acusado reunidos para celebrar el cumpleaños del acusado».
Combs luego «monitoreó los análisis» de las imágenes en las redes sociales y «habló explícitamente con su familia sobre cómo asegurarse de que el video tuviera el efecto deseado en los posibles miembros del jurado en este caso», alega la fiscalía. También se le acusa de hacer un esfuerzo para «filtrar anónimamente un video favorable a su defensa».
El 4 de noviembre, el hijo de 30 años de Combs, Justin, subió un video a Instagram en el que aparecía él y sus seis hermanos (uno de los cuales, Chance, se unió a través de FaceTime) llamando a Combs a prisión para desearle un feliz cumpleaños. En el video, Combs agradeció a sus hijos por su apoyo.
La oposición del 15 de noviembre también afirma que Combs es un «peligro para los demás», «tiene incentivos para huir» y que su nuevo paquete de fianzas propuesto es «insuficiente». Lo acusa de «esfuerzos incansables para contactar con testigos potenciales, incluidas víctimas de sus abusos que podrían proporcionar un poderoso testimonio en su contra».
En la moción de libertad bajo fianza presentada por Combs el 8 de noviembre, los abogados del productor musical afirmaron que el caso de la fiscalía es «débil», citando un video de marzo de 2016 mencionado en la acusación inicial contra Combs, que parecía mostrarlo agrediendo violentamente a una mujer en un hotel de Los Ángeles.
“El video no es evidencia de un ‘descontrol’ forzado, sino más bien un vistazo de unos minutos a una relación consensuada compleja pero de una década de duración entre el Sr. Combs y la Víctima 1”, dijeron los abogados de Combs en la presentación.
La acusación contra Combs se ha centrado en supuestos «freak offs», descritos como actuaciones sexuales organizadas por Combs en las que las mujeres son supuestamente coaccionadas u obligadas a realizar actos con trabajadores sexuales masculinos, a veces durante varios días.
Combs se declaró inocente de todos los cargos. Dos jueces se negaron anteriormente a liberarlo, alegando una posible manipulación de testigos. Los abogados del magnate propusieron previamente una fianza de 50 millones de dólares. El juicio de Combs está programado para mayo de 2025.
Si usted o alguien que conoce ha sido agredido sexualmente, comuníquese con la Línea Directa Nacional de Agresión Sexual al 1-800-656-HOPE (4673) o visite rainn.org .