Global Tattoo Magazine reconoce el talento de Aldo Moreno, el tatuador venezolano que conquistó Suecia

Nombrar a Aldo Moreno en el mundo del tatuaje latino y europeo inmediatamente llama la atención. Un gran público ya reconoce su talento y trayectoria pero pocos conocen cómo el joven barinés logró codearse con los más grandes tatuadores europeos y establecerse en Suecia.

Su camino, como el de muchos, estuvo lleno de tropiezos y momentos difíciles. En muchas entrevistas ya ha confesado que el tatuaje llegó a su vida en un tiempo en el que se encontraba perdido entre su situación económica y su pasión. «Luego de dejar la universidad, por no poder costear los estudios, busqué un trabajo a tiempo completo para poder ahorrar, comprar mis máquinas y comenzar con una nueva etapa. Me prometí que si iba a dedicarme a esto, en vez de continuar con mi carrera universitaria, tenía que estar entre los mejores tatuadores». 

En lo que pareció un abrir y cerrar de ojos, Aldo Moreno pasó de ser un inmigrante venezolano en Colombia (Donde dio sus primeros pasos como tatuador), a radicarse en Suecia, después de pasear por Holanda, Italia, Francia, Suiza, Austria y el Reino Unido. 

El surrealismo de Aldo Moreno brilla en Global Tattoo Magazine

Si hay algo que Aldo Moreno disfruta al entrar en su estudio es la libertad que le ofrece el arte surrealista La posibilidad de crear sin cumplir las reglas del realismo ya es uno de sus sellos personales y una de las razones por las que sus clientes le prefieren. Cada detalle es importante para él, asegura, ya que se enfoca en adaptar el diseño al movimiento de la zona del cuerpo donde se tatúa la persona. 

Gracias a esto Aldo Moreno en pocos días engalanará la revista internacional de tatuajes, «Global Tattoo Magazine», que reúne una antología completa de sesenta tatuadores de diferentes naciones y él, en esta oportunidad, representará a Suecia, el país que tan amablemente le acogió. 

Para enterarte de todos los detalles de sus nuevos proyectos síguelo en su cuenta de Instagram @morenoaldo.

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